MI LIBERTAD DE EXPRESION

Quito, Junio 9, 2007.-

Pido a los lectores enterarse de la Carta que envié, tratando de hacer uso de la libertad de expresión, sobre la que tanto se cacarea en estos días:

30 de Mayo, 2007

MONTANER Y POSADA

Señora
Directora de EL COMERCIO
Presente

Ese “periodista” apátrida, Montaner, comete una blasfemia al pretender un parangón del asesino agente de la CIA, Posada Carriles, con el heroico Comandante Ché Guevara que alcanzó la admiración universal por su generoso desprendimiento al ofrendar su vida en la lucha por la liberación de los pueblos del cono sur americano.

Entre Montaner y Posada hay una plena identidad porque ambos están al servicio del mismo patrono, ambos desertaron de su país, abandonaron la lucha frontal porque no tienen ideales y se convirtieron en terroristas, el uno verbal y el otro efectivamente un asesino, como que puso una bomba a un avión civil asesinando a sus ocupantes.

Provoca nauseas que Montaner pueda destilar su odio en páginas de diarios del continente, sólo porque cuenta con el respaldo de los poderes transnacionales del imperio.

Hoy que se discute el verdadero significado de la libertad de prensa, demando comedidamente la publicación de esta nota para descalificar una comparación entre un gigante de la humanidad como el Che y un terrorista mercenario, protegido por el Gobierno de los Estados Unidos, como Posada Carriles.

Alfredo Vera
Ex Ministro de Educación del Ecuador

Han transcurrido 10 días y el Diario El Comercio no ha tenido a bien permitirme hacer uso de mi derecho a la libertad de expresión, para condenar a un gusano ideólogo de la mafia de Miami, que semanalmente destila veneno y para criticar al Diario El Comercio porque considero que es una vergüenza que un diario que se ufana de su real presencia e incidencia en la vida pública de nuestro país por más de 100 años, con ancestros periodísticos y culturales de valía y un cartel, por lo general, de analistas de buen nivel y prestigio ético e intelectual, por influencias de la política internacional que emana de los Estados Unidos y su aberración de destruir a la revolución cubana, por un lado permita que su página editorial se manche con la presencia de un mercenario como Montaner y, de otro lado, le nieguen a un ciudadano el derecho a expresar una condena por la torpeza de ese sujeto al querer comparar a un paradigma de la honestidad, como el Ché, con un vulgar terrorista asesino.

Como ciudadano practico la modestia, y “abusé” de mi barniz de “ex Ministro” para ver si vulneraba esa especie de veto que se nos impone a personas que no ocultamos nuestra identidad ideológica.

Pero los propietarios o los filtros de los diarios hacen uso (¿o abuso?) del privilegio de ser dueños de la pelota y se practica la desigual confrontación frente el derecho del ciudadano a divulgar su expresión como el niño rico que se lleva el balón de la cancha barrial porque le da su regalada gana.

Si yo fuera un loco necio, el ignorarme y archivarme lo tendría merecido, pero vean ustedes (si tienen tiempo y paciencia) lo que opina sobre el Comandante Heroico, en El Universo de Guayaquil, el intelectual colombiano Carlos Villar Borda (haciendo un clic en el anexo)

Y piensen si esta no es una prueba de que la libertad de expresión está sujeta a la regalada gana de los dueños de las pelotas.-